La representación cinematográfica de la Revolución mexicana constituye un caso ejemplar de la formación ''internacional'' de un imaginario ''nacional''. Esta obra enfoca de manera privilegiada el cambio que se produjo a mediados de los años sesenta, en el marco del auge del spaghetty western y en un específico contexto político-cultural, con la aparición de la visión ítaloeuropea de la Revolución Mexicana. Frente a la compleja relación entre cine y la creación de imaginarios transnacionales, este libro ofrece una antología de los imaginarios cinematográficos sobre México y su Revolución que por fin incluya la mirada ''ítalo-europea'' y permita que los diferentes imaginarios sobre México puedan dialogar entre sí. Este ejemplar indaga sobre la posición de México en una memoria histórica construida cada vez más globalmente. Tildar tal ubicación del país como falsa o denigrante no logra captar la naturaleza de este proceso.