Aunque en este libro se habla sobre los atentados terroristas en el Bataclan de París en donde murieron 131 personas, hay esperanza. Y la hay porque se narra desde el juicio a los terroristas (a quienes se les imponen penas más o menos equivalentes).
Sí lo lees, prepárate para plantearte preguntas filosóficas.
Emmanuel Carrère es enorme.
De las mejores crónicas que he leído. El tema es fascinante. No pierde nunca el ritmo ni el tono. Se lee en dos sentadas, pero te deja mirando la pared, catatónica (guiño para quienes lo hayan leído). Vale la pena el esfuerzo y pasar los momentos duros del relato.
No suelo leer varones, pero Carrère es siempre una excepción.
En breve, una reseña más extensa.
Carrere no falla, desde El adversario he quedado asombrado con lo que escribe.