PICKERING. - Pero, ¿es que no tiene moral, hombre?
DOOLITTLE (impávido). - No puedo darme ese lujo, jefe. Y tampoco podría dárselo usted, si fuese tan pobre como yo. No es que quiera hacer algún daño, ¿sabe? Pero, si Liza obtendrá algo de esto, ¿por qué no yo también?